Introducción: Por supuesto, para ser enviado (apóstol), los discípulos tuvieron que aprender primero con Jesús y luego fueron comisionados. El Espíritu Santo también:
Él vino a enseñarnos
(Jn 14:26)
I - El les enseñará todas las cosas
- Hay mucho que aprender.
- El orgullo es lo que nos hace pensar que lo sabemos todo. Los "espirituales" a sus propios ojos son los más resistentes, pero el que en realidad es espiritual, es humilde - I Corintios 14:37.
-El enseña la palabra, la obediencia, luchar, como debemos orar, enseña a predicar, a adorar ... Él es el maestro por excelencia! Exige, sin embargo, el temor, el respeto y no acepta la blasfemia o ser despreciado, la falta de respeto - Mateo 12:32, I Tesalonicenses 5:19-20.
II – El nos hace recordar
- De todo lo que Jesús habló, de su palabra.
- Recordar nos lleva a que entendamos que tenemos que leer la Biblia, estudiarla, ... , Y en la necesidad, se nos recuerda (a Él la gloria, el honra al que lee).
Conclusión: creer que él vino a enseñar y los quieren aprender de Él a través de sus maestros y pastores es aprovechar de su SABIDURIA.